lunes, 7 de septiembre de 2015

¿CONOCES EL SECRETO TIBETANO? GOJI

Más allá de los valles protegidos por las cordilleras del Himalaya y del Tibet, se conserva cuidadosamente el secreto de los monjes tibetanos: El Lycium Barbarum o planta de Goji.

Sus bayas, de un color rojo carmesí, crecen a más de 4000 metros de altura, legos de la contaminación, y se nutren del agua proveniente de los deshielos de las majestuosas Montañas Sagradas, lo que les hace desarrollar unas características únicas.

Debido a sus innumerables propiedades, entre ellas su gran poder antioxidante, el GOJI también ha sido usado desde antaño en la milenaria Medicina Tradicional China para recuperar la energía vital, es por ello que se conoce como Baya de la Longevidad.

Inspirados por tales conocimientos, el centro de investigación Casmara ha sido el primero en crear exclusivamente para ti el auténtico tratamiento de Goji.








¿QUÉ ES?

Es un tratamiento con alto poder antioxidante debido a su concentración de extractos de BAYAS DE GOJI y a ingredientes naturales que, por medio de nuevas tecnologías dermocosméticas, son transformados en principios activos con u na optima disponibilidad para la piel.

Lycium barbarum o Goji tiene certificado ECOCERT , garantía de agricultura ecológica y natural.


¿PARA QUIEN ESTÁ INDICADO?

Su fórmula unisex está recomendada para cualquier edad, época del año y tipo de piel, especialmente aquellas que presentan los primeros signos de envejecimiento, exceptuando las pieles muy grasas.







MODO DE ACCIÓN


Los antioxidantes son sustancias que tienen la capacidad de inhibir la oxidación causada por los radicales libres, evitando efectos como la disminución de producción de Colágeno, piel envejecida, líneas de expresión, manchas, arrugas, perdida de elasticidad....


EXTRACTO DE BAYAS DE GOJI

El GOJI, conocido como Baya de la Longevidad, actúa como preventivo de los signos asociados al envejecimiento y refuerza los signos naturales de la piel.
Se caracteriza por su gran poder antioxidante gracias a sus exclusivos polisacáridos LBPs, elementos clave de este fruto. Además, es rica en antioxidantes naturales como la zeaxantina y carotenoides y otros componentes indispensables como los ácidos grasos esenciales Omega 3 y 6, oligoelementos orgánicos (manganeso, zinc, hierro, cobre, níquel, cromo, magnesio, calcio, potasio, cobalto, selenio, cadmio, fósforo, germanio...) Beta-sitosterol, minerales, azúcares y aminoácidos.


BETAÍNA

 Obtenida de la remolacha. Juega un papel fundamental en el mantenimiento del volumen y equilibrio del agua celular, basando su acción en la teoría de los osmolitos.


MIEL

Aporta una combinación de azúcares parecida a la del Factor Natural Hidratante cutáneo, proporcionando importantes propiedades hidratantes. Su combinación de aminoácidos, proteínas, vitaminas y enzimas proporciona nutrientes a la piel y favorece su regeneración.


ACEITE DE AGUACATE, MANTECA Y KARITÉ

 Combinado con el resto de principios activos, logran un cosmético hidro-nutritivo de agradable textura.

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